domingo, 24 de agosto de 2014

La sed que no cesa

Sugerente imagen cogida amablemente de www.ueom.com.
Hace tiempo que insinúo en mis entradas del blog que allá por 1996 participé activamente en la elaboración de un cortometraje titulado "Hambre mortal" (lo que comenta Wikipedia en la biografía de Paul Naschy, ¡ja, ja, ja!: Hambre Mortal (Mortal Hunger) 1996; a satirical homage directed by Toni Escalonilla; (not shown in U.S.) y que finalmente pudimos elaborar. Mientras intento pasar la cinta de vídeo que tengo de la película a CD para poder subirla a Visiones aromatizadas de añil (es una promesa solemne que os hago), os voy a reproducir un guión literario de otro cortometraje que redacté al año siguiente, pero que jamás vio la luz ni lo pasamos al celuloide, y que incluso carece de título. Es el que sigue:

Imagen de la entrada del metro de Herrera Oria, cogida de http://www.panoramio.com/

Visión de un andén de metro (Herrera Oria), sucio y asqueroso. Cuatro personas esperan la llegada del tren. Dos tienen pinta de macarras (de los 80' del siglo pasado, es decir cuero negro, pantalón ceñido y zapatillas Converse rojas muy usadas) y los otros dos son normalitos (un hombre con traje y maletín y una mujer de unos 30 años). Se oye el sonido de la llegada del metro, que aparece al fondo y se detiene a la altura de la cámara, con lo que se ve todo el convoy. Se abren las puertas; salen varias personas, entre ellas un chico joven con parka, polo Fred Perry y cascos para escuchar música (menea la cabeza al ritmo de lo que escucha). El hombre del maletín y la mujer entran en el metro. Los que ya han salido se alejan hacia la salida y los murmullos se acallan. El joven se queda en el andén buscando el mapa de calles de la zona; lo encuentra y se acerca a él. Excepto los dos macarras no queda nadie más en la estación. El tren da el silbido de salida y se marcha por donde vino (por entonces era final de trayecto).
Visión del chaval, Antonio, apuntando con un dedo al cristal del mapa. A su espalda, silenciosamente, se colocan los macarras. Uno es más alto que el otro. Pinta de drogatas muy pasados.
Macarra bajito
¡Eh, payaso! ¿Tiés algo?
El joven no escucha por la música. Los macarras se miran y el más alto golpea la espalda de Antonio. El otro le coloca una navaja a un lado del cuello.
Macarra alto
¿T'as sordo, peazo imbécil?
Visión de la cara de Antonio, primero sorprendido y luego sonriendo con malicia. No se vuelve, pero en un gesto rapidísimo agarra de la pechera al asaltante bajo, que está a su derecha y le estampa la cara contra la pared sin que la navaja le dañe en ningún momento. Luego, siempre de espaldas, ladea la cabeza a la izquierda, mientras el herido cae hacia atrás con las manos en la cara.
Macarra Alto
¡Jodé! ¡Jodé! (acojonado del todo)
El más alto huye mientras el otro, con gestos de dolor, contempla su sangre chorreándole por la cara. Antonio mira primero la huida del más alto y luego se vuelve hacia el herido. Se agacha y le aparta las manos de la cara. El bajito intenta echarse para atrás, pero Antonio alarga la mano y unta los dedos en la sangre.
Visión de las yemas rojas yendo hacia la boca de donde sale la lengua para lamerse los dedos. Al probarla realiza un gesto de repugnancia.
Antonio
¡Por Dios, qué asco de sangre!
Antonio le agarra del brazo y contempla marca de pinchazos.
Antonio
Está adulterada.
El macarra logra zafarse de Antonio y se separa de él para arrastarse hacia atrás.
Macarra
¡Vete a la mierda, tío! ¡Déjame en paz! (voz quejumbrosa)
Antonio, ofendido, le agarra del cuello y aproxima su nariz a la del otro. Le habla muy tranquilo.
Antonio
No sé si me hubiera afectado beberme tu sangre. Pero no pienso arriesgarme. En cualquier caso, ya no me sirves.
Antonio hace un movimiento con la mano y se escucha el crujido del cuello del macarra al quebrarse. En ese momento, se escucha un chillido agudo como el de una rata enorme y Antonio se pone alerta. Se levanta rápidamente y mirando hacia las vías echa a correr. El macarra queda atrás fiambre.

Feria del barrio del Pilar en Madrid, cogido de http://www.barriodelpilar.com/

Visión de la salida del metro. Noche calurosa, gentes en camiseta, ambiente festivo. Antonio, pese a la parka, no parece afectado por el calor. Da unos pasos, se detiene y mira atrás.
Visión de un grupo numeroso de unos 20 jóvenes que también le miran impasibles. Destaca uno con coleta, pelo teñido de rubio plateado y una larga gabardina negra de piel. Antonio sonríe y avanza hacia ellos.
Antonio
Bien, bien bien. Ya estamos todos (da una palmada). ¿Cómo andas, Rafa?
Rafa (el de la coleta, cara seria)
Mejor... desde que dejaste el grupo.
Antonio sonríe con una mueca ante la ironía y hace un gesto a los demás.
Antonio
¿Chicos?
Los aludidos no contestan y siguen serios. Una de las chicas se limita a bajar los ojos al suelo.
Antonio
¡Je! ¡Qué simpáticos!
Antonio se dirige a Rafa, quien está encendiendo un cigarrillo.
Antonio
Pues, tú dirás.
Rafa
Echa un vistazo a esto. Es un teletipo.
Le alarga un trozo de papel. Antonio lo coge y lo ojea un instante. Luego mira a Rafa como pidiéndole explicaciones.
Rafa
Es una oportunidad de oro, ¿no lo ves? La Cruz Roja piensa poner un puesto en la Feria para los donantes.
Antonio mira al final de la calle, donde se ven las luces y los cacharros de diversión de una típica feria española. Abre los ojos como platos y sonríe incrédulo.
Antonio
Espera, espera. ¿Me estás diciendo que pensáis aprovecharos de eso?
Rafa (sonriendo triunfal)
¡Exacto! Vendrán a nostros directamente. Ni siquiera tendremos que cazar. ¿Qué me dices?
Antonio le sostiene la mirada. De repente, intenta contener una carcajada. Rafa le mira disgustado. Antonio ya no puede más y comienza a reírse.
Antonio (voz ahogada por la risa)
Pues que no, hombre. ¿Y para esto me has hecho llamar?
Rafa, francamente cabreado, le aferra de la parka y lo zarandea.
Rafa (dientes apretados)
No te permito que te rías de mí.
Antonio le mira fijamente y Rafa hace un gesto hacia atrás como si le hubieran golpeado duramente en la cara. De repente, Antonio se encuentra a unos diez metros de ellos. Ya no habla, sino que se comunican mentalmente.
Antonio
Mucho cuidadito, Rafa. Tus maneras de matón te pueden servir para esa chusma que te acompaña, pero no para mí.
Los del grupo abandonan su quietud y comienzan a avanzar. Algunos sisean como serpientes enseñando sus colmillos puntiaguados. La muchacha de antes aprovecha la confusión para apartarse de los demás y desaparecer. Rafa los detiene con un gesto y mirando a Antonio le dice también mentalmente
Rafa
Tu rebeldía te costará muy cara.
Antonio (mentalmente)
Olvídame. Nunca te consideré nuestro líder.
Cuando la tensión parece ir en aumento se escucha la llegada de sirenas de policía y ambulancia que llegan a la zona y se detienen en la boca del metro. Su presencia no tiene que ver con los vampiros, pero Antonio rompe el momento haciendo un gesto con el dedo corazón hacia Rafa y le da la espalda, mientras el grupo de seres nocturnos se dispersa.
De improviso y tras escucharse el sonido de una leve brisa, al lado de Antonio aparece la chica que se había apartado antes de los demás. Antonio queda sorprendido.
Antonio
¡Elena!
La chica le coge del brazo y le acerca su boca al oído.
Elena
Cuídate de Rafael. Está peor que nunca.
Antonio asiente mirándola amistosamente. Luego ella le besa suavemente la mejilla.
Elena (susurrando sensual)
Te echo de menos.
Antonio se pone serio, pero cuando va a contestar, la chica ya no está con él. Ha desaparecido de la misma forma que antes había llegado a su lado. Antonio da un bufido, mira hacia la feria y con cara pícara dice
Antonio
Bueno. ¿Qué tal un poquito de diversión? (frase que, por cierto, se repite en "Hambre mortal")

Salto. Se oye de fondo el tema Baby, please don't go, de los Them, y comienza un estallido de imágenes con gente divirtiéndose en la feria. Subidos a los coches de choque, comiendo algodones de caramelo, disparando en las barracas, dando vueltas en la noria, en el barco vikingo (ése que se balancea y al que no me subo ni aunque me paguen). Todo ello bien aderezado con risas, gritos y chillidos, alguna que otra imagen de gente bebiendo en los bares y mucha, mucha gente paseándose por el recinto ferial (incluidas algunas familias con niños que llevan globos enormes de helio con las típicas imágenes de los personajes de Walt Disney).
Tras mostrar sobradas y sabrosas (esto es cosa tuya, Antonio*) tomas de gente divirtiéndose de lo lindo, la cámara aparece en un callejón (formado por barracas y chiringuitos) casi a la altura del suelo; ante la cámara aparecen unos pies que se plantan. La cámara hace un movimiento ascendente hasta detenerse a la altura del hombro del personajillo tomándole media cara de espaladas: está mirando un pabellón con una bandera blanca y una cruz roja en medio. Un altavoz repite una y otra vez, con una voz impersonal, un llamamiento a la población con un mensaje de voz monótona (no es necesario que se oiga perfectamente. Recuerda que el sonido de la feria es muy bullicioso)
Altavoz
Sé solidario. Dona tu sangre. Algún día tu vida podría depender de ello (pausa). Es gratis.
El personaje viste con andrajos oscuros y es bastante bajito (la media de estatura de un españolito en los años sesenta). La cámara le rebasa la altura del hombro y se fija en la entrada de la tienda de la Cruz Roja. Por uno de los laterales aparecen Rafa y su panda. Están a unos 12 metros de distancia.
Visión del personaje (hay que intentar que sea Álex Angulo) que, con sofoco, se aparta presuroso hacia la esquina de la atracción más cercana. Está de frente a la cámara y respira agitadamente. Sus manos aferran a la altura del pecho un raído maletín que hace extraños ruidos, como si estuviera cargado de un sinfín de cachibaches. Al cabo, vuelve a asomarse al callejón y ve que Rafael sube las escaleras del autobús (en realidad, la barraca de la Cruz Roja es el típico autobús grande con una camilla y toda la parafernalia que conlleva la extracción de sangre).

Típico autobús de la Cruz Roja para la donación de sangre en la calle. Cogido de http://urbanity.cc/

Salto. Rafa a acaba de entrar en el vehículo y echa un vistazo indiferente a su alrededor. Al fondo hay un apartado con una cortina echada; de allí salen risitas histéricas de una mujer. Justo antes de la cortina, a un lado, está la camilla y los utensilios para donar sangre (con bolsita y todo). Frente a Rafa hay una mesita con papeles, bolígrafos, revistas y un bocadillo de tortilla de patatas a medio comer (con migas y pedazos de huevo alrededor). Rafa carraspea y las risas se callan.
Mujer (susurrando en off)
¡Ay! Para quieto. Creo que hay alguien.
La enfermera se asoma fugazmente y vuelve a meterse dentro. Susurra de nuevo.
Mujer (en off)
Oye. Pues sí.
La chica sale por fin. Es muy jovencita y tiene una agradable sonrisita. Se dirige directamente hacia la mesita, saludando.
Mujer
Hola. Buenas noches.
Tras de las cortinas sale también un muchacho ATS que hace un gesto de saludo hacia Rafa colocándose bien las gafas. Éste sonríe mirando a ambos y luego se vuelve hacia la puerta por donde empiezan a entrar algunos de sus acólitos y acólitas. La sonrisa de la enfermera y del ATS se congelan en un gesto de preocupación.

Salto. El hombre del maletín sigue mirando temeroso. Ante el autobús sólo se han quedado cinco chicos y Elena, que se muestra reticente a entrar. Al final de las escaleras todavía se puede ver a alguno que acaba de entrar en el autobús. Uno de los chicos se abalanza sobre ella intentándola coger de la cintura.
Joven (voz lejana)
¿No vienes?
Elena le empuja enfadada.
Elena (idem)
Ni se te ocurra volver a tocarme.
Los demás ríen mirándose unos a otros y burlándose de la furia de Elena con un típico ¡Ooooooh! La chica entonces lanza un zarpazo a la cara del más cercano y se marcha corriendo. El que recibió el golpe se lleva la mano a la mejilla y exclama
Joven herido (idem)
¡La madre que la parió!
El joven se lanza detrás de ella seguido por otros dos. De los que quedan, uno se marcha por el fondo y el otro se acerca corriendo hacia la cámara sonriendo y lanzando una risita aguda. Pasa veloz al lado del tío del maletín, el cual boquiabierto sale de su escondite y contempla por dónde se ha marchado el joven aullador. Luego desaparece de la pantalla también corriendo en pos del chaval (los cachibaches del maletín vuelven a sonar mientras se aleja).

Salto. Antonio está acodado en la barra de uno de los chiringuitos charlando animadamente con una chica (no se oye lo que dicen porque están lejos). De repente, ante la cámara cruza con prisas Elena. Al fondo, Antonio deja de hablar cuando pasan también los tres que la persiguen de cerca. Antonio mira fugazmente a la chica que tiene al lado y luego a toda prisa se va sin ni siquiera despedirse. La chica hace un gesto de sorpresa seguido de otro de fastidio mientras niega con la cabeza.

Salto. Visión del joven al que persigue el hombre del maletín. Camina sigilosamente de espaldas a la cámara riendo por lo bajo en uno de los callejones aislados de la feria. De repente, le golpean duramente en la cabeza y cae al suelo gimiendo medio atontado. El que le ha golpeado es el hombre del maletín que tiene un gran trozo de madera que ha utilizado a modo de porra. El hombre mira compungido (como con pena) al chaval y se le aproxima.
Anxo (así se llama)
En el nombre del Cielo...
Levanta hasta medio cuerpo la estaca (que por un lado está más aguzada) y la hunde en el cuerpo del joven con un sonido similar al del chapoteo en una ciénaga fangosa.

Salto. Visión del otro joven que se había ido por el otro lado para acorralar a Elena deteniéndose de golpe con cara de asombro y aspirando el aire. La cámara (que estaba de frente y a su izquierda) hace un movimiento semicircular hasta ponerse a la altura del hombro del joven mirando hacia donde él está fijando la mirada: Al fondo de la escena está Anxo que arroja la estaca a un lado, se arrodilla y con un cuchillo hace el gesto de rebanarle el cuello al joven muerto. El otro gruñe como un animal y se acerca a Anxo.

Salto. Afueras de la feria, tras una de las casetas. Primer plano de Elena mirando a su izquierda respirando agitadamente quieta a ver si ha despistado a sus perseguidores. Una mano se le posa en el hombro y ella se vuelve con la suya en forma de garra para golpear, pero otra mano detiene el golpe a medio camino.
Antonio (con sorna)
¡Pero bueno!
Elena suelta una especie de rugido de alivio al comprobar con ojos aún asustados que es Antonio. Éste no dice nada, mira por encima del hombro de ella con expresión seria y la aparta sin brusquedad a un lado para enfrentarse a los tres vampiros que, como por arte de magia, están junto a ellos.
Antonio (hablando con la boca)
Yo que vosotros me piraba echando leches.
Primer plano del joven herido por Elena en la cara frunciendo el ceño. Al responder lo hace con pensamientos (no mueve la boca).
Joven herido
¿Estás de guasa o qué? Somos tres contra ti.
Elena se ubica junto a Antonio mostrando los dientes y con mirada fiera. Antonio responde al joven también con el pensamiento.
Antonio
Vuelve a contar mejor, piltrafilla.
El joven realiza un gesto de fastidio con la boca chisteando sonoramente.

Salto. Cámara subjetiva de muerto tumbado en el suelo. Se ve a Anxo arrodillado contemplando a la cámara. Sobre la rodilla elevada mantiene posado el brazo de la mano donde lleva el cuchillo ensangrentado. Menea la cabeza con pesar.
Anxo (acento gallego)
¡Ay, Señor, Señor!
De repente, echa el cuerpo hacia adelante con cara de susto (saldrá muy natural, seguro) y cae de bruces sobre el vampiro muerto. La caída ha sido provocada por un golpe del joven que se le había acercado por la espalda.
Primer plano de Anxo sobre el muerto con pánico en los ojos. El joven lo atrapa y lo alza sin esfuerzo para colocárselo ante su cara antes de arrojarlo lejos. El pobre Anxo grita al ser lanzado con violencia y aterriza contra el suelo raspándose la cara.
Anxo intenta incorporarse con la cara sangrando. El joven le propina una patada en las costillas que hace rodar al estrafalario gallego. Con gran esfuerzo, se medio levanta respirando dolorosamente y la palma de la mano del joven se le planta en la cara aferrándole de golpe y lanzándolo de nuevo hacia atrás. Esta vez Anxo se golpea de espaldas contra un poste de madera en el que hay una especie de mando para suministrar energía a las luces de parte de la feria.
El joven no ataca enseguida. Se recrea en lo que está haciendo y, de hecho, permite que Anxo se ponga de pie apoyando la espalda contra el poste. No obstante, el vampiro pone cara de hastío, mira al cielo brevemente y en un instante se encuentra junto al gallego con la mano y los dedos estirados y pegados entre sí rozando la frente de Anxo con las yemas.
Menea la mano adelante y hacia atrás, dándole a entender lo que le va a hacer a Anxo. Ninguno de los dos parece divertirse. Anxo cierra los ojos y se pega al poste esperando el golpe final.
El joven echa definitivamente el brazo hacia atrás y, justo entonces, Anxo resbala con una de las piedras sueltas que hay bajo el poste. Cae al tiempo que el otro lanza la mano que acaba incrustándose en el interruptor con gran profusión de chispas.
Primer plano de Anxo iluminado por las chispas y las descargas con la cara de alelado. En off suena el alarido del joven que se está achicharrando vivo.

Éste sería el rostro de Anxo ante el ataque. Cogido de grandespeliculasparaverantesdemorir.blogspot.com
Salto. Imágenes rápidas de varios cacharritos de feria de la misma zona que se quedan sin luz por el cortocircuito provocado por el vampiro. Cabreos de la gente, algún silbido y preguntas de "¿qué pasa?".

Salto. Plano medio del joven herido por Elena mirando al frente concentrado. Detrás se mueve otro de los jóvenes. Justo entonces, se produce el apagón cerca de ellos llamando la atención del trío que miran a la vez a su izquierda (donde está la feria).
Visión de Antonio atacando silencioso. En rápidas imágenes: un puño golpea directo al primero en la cara (aún miraba hacia la izquierda); otro puño de lado le da al siguiente otro golpe atroz en la frente; al tercero le arrea una patada en la entrepierna haciendo que se doble y luego le da otro golpe en la nuca.
Contrapicado de Antonio de pie en medio de los tres cuerpos en el suelo. Elena se le acerca.
Elena
¿Están muertos?
Antonio
Ni queriendo, pero les sacudí bastante fuerte.
Elena
¿Y la luz? ¿Qué habrá pasado?
Antonio
No tengo ni idea, aunque ha sido muy oportuno. ¡Vámonos ya!
Ambos salen de la escena corriendo y dejando atrás a los tres inconscientes.

Salto. Primer plano de la enfermera de Cruz Roja con los ojos abiertos y fijos que va resbalando al suelo hasta caer con un golpe sordo. A medida que cae deja ver a Rafael en un segundo plano con la boca manchada de sangre y ojos de éxtasis. Suelta un bufido de hartazgo y mira a su derecha.
Visión de varios jóvenes rodeando el cadáver del ATS, al fondo del autobús, en una imagen que recuerda a una piara de cerdos comiendo al mismo tiempo del mismo sitio. Se oyen gruñidos y silbidos, hay empujones. Uno tiene una de las muñecas el ATS en la boca mientras sorbe sonoramente. Otro hace lo mismo con el tobillo.
Primer plano de Rafael sonriendo con la misma expresión de éxtasis de antes. Respira igual que si hubiera comido siete fabadas seguidas.

Salto. Anxo llega despacio al lugar donde se encuentran los tres vapuleados por Antonio. Tiene un pañuelo en la cara ensangrentada y se ven también manchas negras como de tizón. Echa un vistazo asombrado al trío.
Anxo
¡Carallo con la chica! ¡Qué barbaridad!
Primer plano de sus manos abriendo el maletín y sacando una estaca y un mazo (la cámara los enfoca bien un instante).

Salto. Imagen de la noria (¡cómo no!) iluminada en funcionamiento. Voz en off de Antonio.
Antonio (en off)
¿Así que ya no vas a volver con ellos?
Elena, también en off, responde con una doble onomatopeya de negación (mmn, mmn). La cámara desciende hasta enfocarlos. Siguen en un lugar apartado del bullicio.
Antonio
¿Y?
Elena (pícara)
No lo sé aún. ¿Quizá me quede contigo?
Antonio ríe sarcástico, pero no responde a su pregunta. Se detiene (estaban paseando sin prisas) y mira alrededor.
Antonio
¿Te apetece bailar?
Elena enarca las cejas sorprendida y afirma con la cabeza con una medio sonrisa.
Elena
¿Y la música?
Antonio levanta una mano con el índice hacia arriba haciéndose el interesante. Saca del bolsillo de la parka los cascos y se los pone (por la época es un walkman). Luego se vuelve hacia Elena y la agarra como si fuera a bailar una lenta. Elena frunce el ceño divertida.
Antonio
Ahora mírame... Y concéntrate.
Plano de la mano que activa el play y se guarda el cassette de nuevo en el bolsillo. Ambos se miran fijamente y, poco a poco, comienza a sonar la música, muy bajo al principio, aumentando paulatinamente de volumen hasta que es lo único que se escucha ocupando la totalidad de la banda sonora. Elena se sorprende gratamente con esa experiencia y se deja llevar mecida por las notas del "Open your eyes", de los Mod Fun.
Imágenes de ambos bailando desde varios ángulos que se fusionan unas con otras o se superponen.
Plano de los pies de ambos que empiezan a levitar sobre el suelo y giran al ritmo de la música.
Plano medio de ambos deteniéndose en pleno aire, aunque no a mucha altura, se miran y lentamente inician un beso.
Silueta de una pareja bailando. Cogido de http://es.123rf.com/

Al separar de nuevo los labios, la música se para de repente y se hace el silencio. Elena le mira con ojos de angustia tras hacer un gesto de dolor. Antonio la contempla asustado; parece que va a hablar, pero no puede porque Elena se le escurre de entre los brazos después de vomitar un poco de sangre.
Visión de Anxo asestándole a Elena un segundo golpe de estaca en la espalda (nada de caras de sádico ni chorradas de ésas, ¿eh?).
Elena cae definitivamente al suelo y Antonio se queda pasmado con los brazos en alto (casi manteniendo la forma de cuando estaban bailando). Luego se arrodilla junto a ella acariciándole la cara con las manos. Anxo le pone una mano en el hombro.
Anxo
Vamos, vamos. No te pongas así. Te he librado de una buena. Era una...
Antonio al notar la mano en su hombro mira hacia arriba con ojos desorbitados de odio y antes de que Anxo termine la frase le aferra la mano con la suya y la aprieta oyéndose el crujido de los huesos al ser machacados.
Plano de Anxo que ni siquiera puede gritar de puro dolor. Antonio se levanta retorciéndole además el brazo.
Antonio (voz de rabia y dientes apretados)
¿Qué has hecho? ¿Por qué? ¿Quién eres?
Anxo (voz ahogada por el dolor)
¡Dios mío! Tú también.
Antonio (gritando)
¿También qué?
Anxo (misma voz)
Uno de ellos.
Antonio frunce el ceño y lo suelta mirándole extrañado. Anxo se agarra la mano machacada con la sana. La mano de Antonio le aferra la barbilla y le obliga a girar la cara para que le mire.
Antonio
Explícate antes de que te mate... Con mucho dolor.
La voz de Anxo suena deformada por la presión de la mano de Antonio.
Anxo
Soy Anxo; Anxo Carballeira de Ribadavia, y he venido para acabar con vuestra plaga.
Antonio le suelta condisgusto.
Antonio
Pero ¿qué dices?
Anxo
Una Meiga me contó que era mi destino acabar con vosotros y he viajado por todo el país matándoos uno a uno. Sólo me quedaba venir a la capital.
Antonio le vuelve a agarrar de la cara.
Antonio
¿Lo haces por placer o por dinero? ¿Eh, asesino?
Anxo parece ofendido. Se zafa de Antonio con un gesto de la mano.
Anxo
¿Asesino? ¡Mira quién habla! Yo imparto justicia. Sois lo peor de este mundo y alguien tiene que pararos los pies, porque campáis a vuestras anchas
Antonio
Escucha, cretino. Hay cosas peores en lo más profundo de las alcantarillas, donde ni yo me atrevo a entrar. Vuestra raza, ésa sí que es peligrosa. Incluso para la nuestra.
Antonio hace una pausa para mirar a Elena y se pasa una mano por el cabello.
Antonio (voz triste)
Seguro que tú te crees todas esas chorradas sobre no muertos y tonterías por el estilo, ¿no? A ver si te enteras bien, mierdecilla: me siento muy vivo; incluso más que tú.
Anxo (desorientado)
Tú matas gente...
Antonio
¿Gente? ¿Cómo que gente? ¡Comida! Lo mismo que tú cuando matas un cerdo y te lo zampas.
Antonio calla mientras contempla no lejos de allí a dos chavales que se agachan para atender a otro que está en el suelo totalmente ebrio. Ninguno parece mayor de edad. Sus voces se oyen lejanas.
Chaval 1
¡Joder! Menuda cogorza lleva encima
Chaval 2
¿Me quieres ayudar de una vez?
Antonio se vuelve hacia Anxo con una expresión animada en la cara.
Antonio
Mira, Pancho, o como quiera que te llames, ¿sabes por qué no te voy a matar?
Al decir las siguientes palabras Antonio recalca cada una de ellas golpeando suavemente con un dedo en la nariz de Anxo.
Antonio
Porque me vas a hacer un favor, hombre (deja de darle golpecitos y pone cara de indiferencia). Por las cuenta que te trae, claro.
Anxo
¿Un favor? ¿A ti? Antes la muerte, ¿habrase visto?
Antonio
Encantado...
Anxo
¡Espera! No digo que no, pero tampoco me importaría saber en qué estás pensando.
Anxo, al decir esto, pone cara de circunstancias (meneo de cabeza, por ejemplo).

Salto. Visión de la mesa de recepción del autobús de la Cruz Roja. Una mano tamborilea sobre la superficie. La cámara sube y muestra a Rafa que tiene la cara hundida en la palma de la otra mano mirando aburrido a sus acólitos que están al fondo de la sala. Juegan con los dos muertos: Les levantan las manos para comprobar riendo cómo vuelven a caer pesadamente. Uno de ellos se ha puesto la bata blanca del ATS y hace como si le sacara sangre a otro de ellos, que pone burlándose muecas exageradas de miedo al ver la aguja y la jeringuilla acercándose a su cara.
Primer plano de Rafa mostrando cara de asco y suspirando. Aprieta los dientes y se oye en off un chirrido.
La cámara nos muestra uno de sus dedos arañando la superficie y dejando una marca sobre la mesa. Luego susurra.
Rafa
Mierda.
En off se escucha la voz de Antonio.
Antonio
El negocio no marcha, ¿eh?
Rafa se vuelve deprisa y ve a Antonio sentado junto a él sobre la mesa.
Al fondo, los jóvenes dejan de hacer el tonto y miran a Rafa y a Antonio con preocupación.
La sorpresa inicial de Rafa pasa a ser autosuficiencia. Se relaja cómodamente en la silla poniendo un brazo en el respaldo.
Rafa
Sinceramente, no me esperaba semejante desfachatez por tu parte.
Antonio se echa hacia adelante y con tono confidencial dice
Antonio
Reconócelo; sin mí te aburres soberanamente (realiza un gesto de quitarle importancia al tema y cogiendo un bolígrafo añade): A mí me pasa algo parecido.
Antonio salta ágil de la mesa y mira a su alrededor seguido por la mirada suspicaz de Rafa.
Antonio
¿Sabes? Tu plan no era malo del todo, peeeero..... Me temo que no tienes ni idea de en qué época vives.
Rafa
No te capto, amigo.
Antonio
Normal. Tu onda se quedó desfasada ya en el siglo XIX. ¿De verdad crees que la gente de hoy está dispuesta a dar su sangre por nada? ¡Despierta ya, hombre!
Rafa arruga la frente disgustado.
Antonio
No vendrá nadie, y menos en fiestas. Aunque, si tú quieres, podemos ir nosotros a convencerles. Al fin y al cabo (mira a los lados con las manos extendidas a media altura a ambos lados del cuerpo), esto no deja de ser una buena tapadera.
Rafa relaja la cara levantando las cejas. Contempla a Antonio sopesando sus palabras. La comisura del labio se le levanta en una medio sonrisa y afirma con la cabeza.
Antonio (en off)
Bien. Yo me encargo, como siempre.

Salto.Suenan las notas del "Town called Malice" de los Jam, al tiempo que se ven rápidas imágenes mudas de una persona bebiendo en una barra y por detrás se le acerca Antonio que lo saluda sonriendo y sin forzar, le "convence" de que lo acompañe.
Sigue la profusión de imágenes acompañadas por la música de The Jam. Visión de una escopeta disparando un corcho. El joven tirador se da la vuelta rodeado por sus amigos que le felicitan riendo por haber ganado una botella de licor en la barraca de tiro.
Sigue la música. Imagen de uno de los vampiros sorbiendo del cuello al ganador de la botella que se le resbala lentamente al suelo seguida de la cámara hasta que se estrella en el suelo del autobús de la Cruz Roja.
Sigue la música. Imagen de una jeringuilla que está en el suelo; la cámara sube y muestra la cara de un yonqui con los ojos cerrados y la cara hacia arriba. De repente una mano le tapa la boca y lo arrastra sin esfuerzo hacia atrás.
Continúa el tema de los Jam. Visión de Anxo mirando en un apartado cómo Antonio se lleva a otra víctima al autobús saludando al pasar al cazavampiros gallego.
Sigue la canción. Visión de dos de los jóvenes alimentándose con otra persona dentro del autobús.
Continúa la canción. Imagen de Rafa (satisfecho) y Antonio (sonriente) mirándose y, sin venir a cuento y sin previo aviso, la música se para al tiempo que Antono le asesta un sólido y soberbio cabezazo a su "amigo" en la cabeza tumbándolo.

 FUNDIDO EN NEGRO

Kit para matar vampiros. Cogido de arquivoufo.com.br.

Plano medio de Antonio acercándose a la puerta del autobús y lanza un silbido.
Antonio
¡Pancho!
Antonio vuelve la cabeza hasta donde yace inconsciente Rafa. Se agacha y realiza gestos negativos con la cabeza. Tras él aparece Anxo con el maletín y se queda literalmente alucinado con el panorama con que se encuentra:
Plano general del autobús (trucado, por supuesto, para que parezca ancho) en el que se ve todo el suelo con cadáveres y los jóvenes tumbados en el suelo con caras perdidas intentando incorporarse sin poderlo hacer. La cámara se mueve hasta detenerse en Antonio junto a Rafa. Antonio mira a la cámara.
Anxo (en off)
¡Santa Madre de Dios! ¿Qué ha pasado aquí?
Antonio
Están todos borrachos o intoxicados.
Antonio se levanta y señala a Rafa.
Antonio
Éste no, así que cuidado con él.
Antonio se acerca a Anxo y le empuja para pasar y salir de allí.
Antonio
Haz tu jodido trabajo, matarife.
Antonio sale y Anxo hace gestos de abrir el naletín. Saca sus instrumentos y se acerca primero a Rafa.
Anxo (hablando para sí)
¡Vaya nochecita!
Coloca la estaca en el pecho de Rafa y levanta el mazo. Al tiempo que lo baja dice con rabia pero sin gritar:
Anxo
Y no me llamo Pancho...

Salto. Visión de Antonio fuera del autobús aguardando apoyado en el mini-pasamanos de la escalera. Mira hacia arriba en el momento en que Anxo sale del autobús con gesto descompuesto y salpicones de sangre en la cara y en la ropa. En la frente muestra un feo desgarrón.
Anxo (voz de agotamiento)
Está hecho.
Antonio señala con un gesto rápido de la mano a la frente de Anxo.
Antonio
¿Y eso?
Anxo (pasándose los dedos por la herida)
Uno, que no quería morir.
Antonio
Buen chico. Y ahora...
Antonio saca un Zippo ante la mirada de curiosidad del gallego. Lo abre y lo enciende.
Antonio
Toma. Está todo rociado de alcohol y gasofa. La gente creerá que es un ajuste de cuentas entre narcos o que fueron los skins. ¡Qué más da! Elimina las pruebas.
Antonio le entrega el encendedor y se aleja del lugar.
Plano medio de Anxo que mira el mechero un momento y lo arroja dentro del autobús después. A su lado se escucha algo parecido a un ¡flushhhhh! como si algo se prendiera de golpe y el cuerpo del gallego se ilumina con las llamas (pero no se ve el incendio para que no haya que quemar el autobús en la realidad).

Imagen de un autobús en llamas. Cogido de www.colchonero.com.
Anxo mira a Antonio entrecerrando los ojos. La cámara nos muestra su mano metiéndose en un bolsillo del que saca un crucifijo.
Anxo
¡Eh!
Antonio se vuelve y ve aproximarse al gallego con el crucifijo en alto y pasos tambaleantes. Deja que se le acerque y con tremenda lentitud le quita a Anxo el crucifijo sin que le ocurra nada. El gallego se queda del todo desolado.
Antonio (voz paciente)
Mira. No sólo me has ayudado a eliminar a la competencia directa, sino que te has convertido en todo un aliciente para que mi existencia no termine siendo un auténtico coñazo. Pero no tientes a la suerte.
Antonio le da unos golpecitos en la cara a Anxo.
Anxo
¿Por qué lo has matado?
Antonio
Yo no he sido. Lo hiciste tú.
Anxo mueve la cabeza como disculpándose. Encoge los hombros. Su voz es dubitativa y tartamudea.
Anxo
Yo no... Yo. Pero si tú...
Primer plano de Antonio muy serio  (casi triste) que se olvida del gallego. En off y de fondo se vuelve a escuchar la voz de Elena diciendo: "Te echo de menos". Pero su rostro cambia de golpe y sonríe.
Antonio (animado)
Simple rivalidad. Rafa era del Madrí y yo, del Aleti.
Antonio se ríe, da la vuelta y deja al gallego solo y con cara de incrédulo. Se escuchan sirenas de fondo que se van acercando.

FUNDIDO EN NEGRO y FIN de esta asquerosa y sangrienta historia.

Si alguien cree que en esa época existían en España los CSI capacitados para averiguar lo que había pasado entre los restos de un autobús carbonizado que lo olvide. Por alusiones, el primer tema que incluyo aquí es el "Open your eyes" de los americanos Mod Fun. Me encanta.



Los irlandeses Them con su fastuoso R&B en el "Baby, please don't go". Es uno de mis temas favoritos de toda la vida. Ya lo creo.


Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Down to New Orleans (Allí, a Nueva Orleans)
You know I love you so (Sabes que te quiero tanto)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Well, your mind done gone (Bueno, mentalmente ya te has ido)
Well, your mind done gone (Bueno, mentalmente ya te has ido)
Well, your mind done gone (Bueno, mentalmente ya te has ido)
Left the county farm (Te largaste de la granja del condado)
You had the shackles on (donde tenías puestos los grilletes)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Before I be your dog (Antes de que me convierta en tu perro)
Before I be your dog (Antes de que me convierta en tu perro)
Before I be your dog (Antes de que me convierta en tu perro)
To get you way down here (para traerte de vuelta)
I make you walk alone (prefiero dejarte en paz)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Hey (¡Oye!)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Down to New Orleans (Allí, a Nueva Orleans)
You know I love you so (Sabes que te quiero tanto)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
'Fore I be your dog (Antes de que sea tu perro)
'Fore I be your dog (Antes de que sea tu perro)
Before I be your dog (Antes de que sea tu perro)
Get you way down here (y traerte de vuelta)
Make you walk alone (mejor te dejo en paz)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Know how I feel right now (Trata de saber cómo me siento ahora)
My baby leavin' (Mientras mi nena me abandona)
On that midnight train (En ese tren de medianoche)
And I'm cryin' (Y estoy llorando)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Oh, baby, please don't go (¡Oh! Nena, por favor no te vayas)
Baby, please don't go (Nena, por favor no te vayas)
Down to New Orleans (Allí a Nueva Orleans)
You know I love you so (Sabes que te quiero tanto)
Baby, please don't go, yeah (Nena, por favor no te vayas, ¡sí!)
Before I be your dog (Antes de que me convierta en tu perro)
Before I be your dog (Antes de que me convierta en tu perro)
Before I be your dog (Antes de que me convierta en tu perro)
To get you way down here (Para traerte de vuelta)
I make you walk alone (prefiero dejarte en paz)
Baby, please don't go, yeah (Nena, por favor no te vayas, ¡sí!)
Alright (De acuerdo)

Y aunque ya he incluido este tema en otras dos entradas del blog (http://jmjcollantes.blogspot.com.es/2011/10/purismo-para-nada.html y http://jmjcollantes.blogspot.com.es/2014/02/la-segunda-de-los-bancos-y-los.html), la incluyo de nuevo, porque me resulta una delicia. Aparte de eso, bien podría haberla cambiado en el guión, pero es que en esa época todavía no se había usado la canción en película alguna hasta que se hizo Billy Elliot en el año 2000 a cargo de Stephen Daldry. Y yo quería ser lo más fiel posible al original redactado por entonces, ¡ea! "Town called Malice", The Jam.